5 Consejos para controlar el olor de la caja de arena

El olor de la caja de arena puede ser la parte más difícil de vivir con un gato. Incluso si no te molesta, recibir visita de amigos a quienes "el olor a gato" no les gusta es vergonzoso.

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Aquí hay algunos pasos simples que usted puede tomar para luchar contra el mal olor y que usted y su gato sean felices:

1. Saque la caja diariamente. La orina y las heces no son tan malolientes como el material fresco, pero cuanto más tiempo se quede allí, lo más probable es que el olor invada el resto de su casa. Recoja su caja de arena temprano y con frecuencia para reducir el olor.

2. Cambie la caja de arena una vez al año. Con el tiempo, las garras de su gato y sus mordidas pueden hacer pequeñas ranuras en la parte inferior y los lados de su caja de arena. Estas ranuras son más difíciles de esterilizar y puede retener olores. Evite esto donando su caja de arena a un albergue o grupo de rescate y regale a  su gato una nueva caja de arena.

3. Trate con desodorantes . Usando un poco de soda de hornear o desodorante en su caja de arena podrá tener una casa más fresca. Sin embargo, muchos gatos dejarán de utilizar las cajas de arena fuertemente perfumadas, así que asegúrese de usar un desodorante que tanto a usted como a su gato les gusta (o uno sin aroma). Espolvoree un poco de el desodorante sobre  la caja de arena cada vez que lo limpie.

4. Busque una marca y aroma que les guste. Trate de usar un desodorante  diferente en cada caja de arena en su casa y ver (a) que arena de su gato prefiere y (b) que controla mejor el olor. Usted puede encontrar que usted y su gato tienen una preferencia en común .

5. Mantenga la caja de arena en un área bien ventilada. Uno de los mayores errores de los dueños de gatos es poner la caja de arena en un espacio pequeño, oscuro y oculto. Esto sólo permite que el olor se concentre. Además, si es desagradable para su gato a usarla, será más probable que encuentre otro sitio donde ir - tal vez en el centro de su cama. Mantenga la caja de arena en un lugar bien ventilado donde el olor puede dispersarse y hay suficiente luz y espacio para que su gato entre y salga cómodamente.