Paso uno: Encuentre el momento adecuado
Cepille los dientes de su perro cuando está tranquilo y relajado. Su objetivo: Establezca una rutina. El cepillado diario es ideal. Pero si su boca está saludable, incluso tres días a la semana puede hacer una diferencia. Sin el cepillado, la placa se acumula y pone a su perro en riesgo del mal aliento, enfermedades de las encías y la caries dental. También puede causar infecciones dolorosas. Las infecciones graves se puede propagar, causando enfermedades potencialmente mortales.
Paso dos: Reúna sus herramientas
Usted querrá usar un cepillo de dientes para perros. Las cerdas son más suaves y con un ángulo especial. Cepillos pequeños puede funcionar bien para los perros de menos de 30 libras. Para los perros más grandes, mangos más largos pueden dar un mejor alcance. Asegúrese de usar la crema dental para perro, también. Viene en sabores amigable para el perro como pollo o mantequilla de maní. Nunca utilice pasta de dientes para humanos, ya que contiene ingredientes que pueden dañar el estómago de su perro.
Paso tres: asumir la posición
Asegúrese de que está en un lugar donde su perro se sienta cómodo. No se ponga por encima de su perro, no lo sujete o no adopte una postura amenazante. En su lugar, trate de estar de rodillas o sentado frente o al lado de su perro. Medir el nivel de ansiedad de su perro.Si parece molestarse detengase y vuelva a intentarlo más tarde. Es posible que tenga que trabajar en el dominio de cada uno de los siguientes pasos en el tiempo.
Paso cuatro: Encías
Pon a prueba la disposición de su perro para ello toque su boca frotando el dedo a lo largo de las encías y los dientes superiores. Esto le ayudará a acostumbrarse a la sensación de algo en contra de sus dientes. Utilice una presión ligera. Puede que tenga que tomarle el gusto a esto durante un par de sesiones antes de continuar.
Quinto paso: Pruebe la crema dental
Ponga un poco de pasta de dientes del perro en la punta del dedo. Deje que su perro lama la crema dental de la punta del dedo para que pueda acostumbrarse a la textura y el sabor. Si después de unos días ella se niega a lamer más pasta de dientes después de que probó su sabor inicial, pruebe un sabor diferente. Con suerte, usted encontrará el que le encante a su perro.
Paso seis: Pruebe el cepillo de dientes
Levante el labio superior. Al acercarse a los dientes con el cepillo, busque el ángulo de las cerdas para que lleguen a la línea de las encías. La colocación del cepillo en un ángulo de 45 grados contra los dientes ayudará a que las cerdas masajee las encías y limpie la placa.
Paso siete: Utilice un movimiento circular
Cepille los dientes de su perro en pequeños círculos, la parte superior e inferior de cada lado. A medida que mueve las cerdas a lo largo de la línea de las encías, puede ocurrir un sangrado ligero. El sangrado leve de vez en cuando está bien. Pero el sangrado continuo o abundante puede significar que usted está cepillando demasiado fuerte o puede ser un signo de enfermedad de las encías. Hable con su veterinario para que lo aconseje.
Paso ocho: Enfocarse en la placa
Cepillo un diente a la vez. El objetivo es de dos minutos de cepillado en total. Si el perro se resiste al principio, tratar de cepillar los dientes caninos y la parte de atrás, donde la placa tiende a acumularse. Si usted puede conseguir el llegar más al fondo seria excelente. Pero si usted no puede llegar a ellos también, no te estreses demasiado. Su lengua gruesa ayuda a mantener la zona limpia.
Paso Nueve: ser tranquilizador
Mantenga un buen estado de ánimo mientras cepilla los dientes de su perro. Habla con tu perro mientras lo cepilla a diario, diciéndole exactamente lo que estás haciendo. Recuérdele buen perro que es acariciando sus mejillas o su cabeza.
Paso diez: terminar con una nota positiva
Cuando haya terminado de cepillar los dientes de su perro, recompenselo con su golosina favorita o atención especial. Asimismo, recuerda que un buen cuidado dental no termina con el cepillado. Ciertos masticables y golosinas también pueden ayudar a combatir la acumulación de placa. Y no se olvide de programar limpiezas dentales profesionales regulares. Hable con su veterinario acerca de la frecuencia con que es correcto para su perro.
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